Conversaciones con Neto Rivas

Buenos días

EL PENSAMIENTO DEL DIA
“Todos los que logren (alcanzar el) júbilo, deben compartirlo. La felicidad nació como gemela”.
-Lord Byron

LA ESQUINA POÉTICA DEL MARTES

SONETO LXXXIX
Cuando yo muera quiero tus manos en mis ojos:
quiero la luz y el trigo de tus manos amadas
pasar una vez más sobre mí su frescura:
sentir la suavidad que cambió mi destino.
Quiero que vivas mientras yo, dormido, te espero,
quiero que tus oídos sigan oyendo el viento,
que huelas el aroma del mar que amamos juntos
y que sigas pisando la arena que pisamos.
Quiero que lo que amo siga vivo y a ti te amé
y cante sobre todas las cosas,
por eso sigue tú floreciendo, florida,
para que alcances todo lo que mi amor te ordena,
para que se pasee mi sombra por tu pelo,
para que así conozcan la razón de mi canto.

Pablo Neruda

COMENTANDO LA NOTICIA

Estoy siguiendo con atención, el debate político que se está dando, alrededor de la construcción de la nueva autopista Diego de Olguín, entre los ecólogos profesionales, la alcaldía de San Salvador en particular y el FMLN en general, por un lado y por el otro el gobierno, a través de los ministerios de OOPP y del Medio Ambiente, por la despiadada tala de árboles en la finca El Espino, en el trazo de la carretera que la rompe de punta a punta.

Como muy bien dice mi amigo Juan Héctor Vidal en su columna de ayer lunes en La Prensa Gráfica, “La falta de coordinación entre el MOP y el MARN ha sido aceptada tácitamente por sus máximas autoridades, dando la impresión de que los espacios para las acciones concertadas son limitados, aun al interior del propio gobierno”. Por el contrario, sus opositores dan claras señas de estar trabajando en perfecta armonía, contaminando los bien entendidos sanos principios ecológicos, con lo político. Esto, como es natural, degenera el pleito y lo convierte en un diálogo entre sordos.

Lo que es peor, como señala Juan Héctor, es claro que la ley solo tiene para algunos funcionarios, un significado relativo, lo que conduce a las partes contendientes a someterse a sus agendas propias. Es una pena, que un tema tan trascendental se haya politizado.

El pleito es eterno. Hemos visto las mismas posiciones anteriormente en otros proyectos de desarrollo de infraestructura y, seguramente, lo veremos nuevamente, cuando se trate de la construcción de la autopista del Norte, que se proyecta llevar a cabo con los fondos que parecen seguros, de la Cuenta del Milenio.

Uno de los opositores profesionales, el ecólogo y primer regidor municipal Ricardo Navarro, tiene ratos de andar manifestando su protesta contra los gobiernos salvadoreños. Cuando yo era embajador en Washington, en la década de los años 80, Navarro era parte activa de los grupos vociferantes contra el gobierno de aquel entonces, que se dedicaban a seguir mis pasos, con el único propósito de manifestar beligerantemente su opinión política, durante mis ponencias públicas. Y continúa siempre tan campante. Gallina que come huevo, aunque le quemen el pico.

La necesidad de implementar programas de desarrollo de la infraestructura nacional es innegable. Y siempre chocará con los medioambientalitas y sus posturas de oposición total porque, como es indiscutible que esos proyectos afectan en medioambiente, aunque se apliquen paliativos que atenúen los perjuicios inevitables. Pero si se les concede todo lo que pretenden, tendremos pronto un lindo país lleno de bosques y pájaros, pero con una economía estancada.

Lo que llama poderosamente la atención, y esta es la razón de este comentario, es señalar que los medioambientalitas no denuncian la horrible contaminación causada por los millares de autobuses dilapidados que circulan por las calles urbanas echando humo nocivo, sobre todo en el gran San Salvador. ¿Será que los mismos ecologistas no le ven mayor perjuicio ambiental a ese humo ponzoñoso, o son aliados y protectores políticos del gremio intocable, aunque universalmente repudiado, de los empresarios de buses?

Una nota al margen
Mi columna, Ética, la gran ausente, publicada en este blog el 12 de septiembre, fue recogida y publicada por el diario La Tribuna de Tegucigalpa, Honduras, el domingo 17 del corriente mes. La publicación está accesible en http://www.latribunahon.com/109095.html por si hay interés.

Hasta mañana