Conversaciones con Neto Rivas

Buenos días!

EL PENSAMIENTO DEL DIA (Continúa)

Luego el hombre sabio preguntó:- ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran?Ellos no se gritan sino que se hablan suavemente,¿por qué?
Sus corazones están muy cerca. La distancia entre ellos es muy pequeña.El sabio continuó... - Cuando se enamoran más aún,¿qué sucede?
No hablan, sólo susurran y se vuelven aún más cerca en su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar,
sólo se miran y eso es todo.
Así es cuando están cerca dos personas que se aman.Luego dijo: - Cuando discutan, no dejen que sus corazones se alejen,
no digan palabras que los distancien más...
Llegará un día en que la distancia sea tanta
que no encontrarán más el camino de regreso.
(Autor anónimo)

LA ESQUINA DE RECUERDOS DEL JUEVES
Voy a comenzar con uno mío, pero se trata que ustedes, mis amigos y amigas que me honran leyéndome y que hayan vivido lo mejor del siglo pasado, allá alrededor de mediados de siglo, por los años 50, me manden por escrito, un recuerdo que guarden vívido en sus memorias, de aquellos años que dejamos atrás para siempre. Yo los publicaré con gusto.

Recuerdo, como que fuera ayer, que antes de iniciar los trabajos de pavimentación de Santa Tecla, allá por los años cincuenta, la ciudad no tenía servicio de alcantarillado de aguas lluvia y, en invierno, la lluvia que caía, corría por las empedradas avenidas, del volcán hasta desembocar en la quebrada “El Piro”, en lo que llamábamos “las crecientes”. Cuando a principio de los años 40 se pavimentó la calle que venía se Santa Ana, hacia San Salvador, hubo que hacer, en cada esquina, unas depresiones, de suerte que el agua de “las crecientes”, pudiera seguir su curso hasta la quebrada. Los vehículos pasaban por allí como ir en montañarusa. En una esquina, la formada por la 8ª Avenida y la 4ª Calle (esta era “la pavimentada”) la depresión era la más profunda de todas, por el caudal de agua que corría por esa avenida y frecuentemente, los vehículos que transitaban de o para occidente, quedaban ahogados a media “creciente”, con el consecuente peligro de ser arrastrados. Para que los peatones cruzaran de un lado a otro de las avenidas empedradas, la alcaldía colocaba en las esquinas de mayor tráfico pedestre unos puentes portátiles de madera, que según su antigüedad, se balanceaban y traqueteaban peligrosamente con el peso del transeúnte. Para los nosotros, niños estudiantes en la época, “las crecientes” eran un deleite, por que en ellas jugábamos con barquitos que inventábamos nosotros mismos de papel, y hacíamos “carreras” con ellos. Con frecuencia, chapoteábamos en el agua que corría, a pesar de los catarros que pescábamos y las nalgueadas de nuestros padres, al regresar empapados de nuestros colegios.
Recuerdos de ayer, sueños de mañana.

COMENTANDO LA NOTICIA
Los informes de prensa indican, que El Salvador ha sido escogido por la Junta Directiva del la Cuenta del Milenio, para ser favorecido con un donativo muy importante, cuya suma, aun no determinada, podría llegar arriba de los $400 millones. El Estado invertirá esos dineros en la construcción de una carretera que cruzaría el país por el norte. Bien pensada la idea. Ese es un proyecto muy antiguo, anhelado por todos los habitantes de esa rica zona del país y ahora parece que su realización, por fin, se aproxima.

Para hacernos acreedores a esos fondos, tuvimos que demostrar que El Salvador ha cumplido o se compromete a cumplir ciertos parámetros indispensables establecidos por Junta Directiva de la Corporación del Reto del Milenio (MCC, sus siglas en inglés).

En consecuencia, el desembolso de los fondos se distribuirá en un período de cinco años, y la MCC estará monitoreando muy de cerca el cumplimiento con aquellos parámetros con los que el país aun no cumple. Si esos objetivos no se logran, a juicio de los controladores, los desembolsos son suspendidos, hasta cuando el compromiso sea satisfecho.

Los indicadores para determinar políticas de selección son tres: gobierno con justicia, libertad económica e inversión en la gente. El primero contempla: libertades civiles, derechos políticos, libertad de expresión, responsabilidad en la gestión, efectividad del gobierno, imperio de la ley y control de la corrupción. El segundo contempla: costo y tiempo que toma para inscribir e iniciar un negocio, inflación, política fiscal y de comercio exterior y el peso de la burocracia en la economía. Finalmente, el tercero contempla: el gasto en salud pública, tasa nacional de inmunización contra sarampión y DPT3 (la serie de vacunas contra la difteria, tos ferina y tétano), gasto público en educación primaria y tasa de finalización de estudios primarios en las mujeres.

He enfatizado los indicadores que hemos reprobado, incluyendo el control de la corrupción, el que aprobamos a duras apenas. Ignoro cuáles fueron los criterios que la MCC tuvo a la mano para medir niveles de corrupción y ello me preocupa, pues es evidente ---y no solamente por los casos ejemplares, ANDA, etc. — sino por la convicción que prevalece universalmente, que la corrupción en el país anda suelta por las calles. Imperio de la ley, es otro criterio que preocupa, por la evidente falta de cumplimiento con las leyes, las que, en muchos casos, son manipuladas como mejor le convenga a los que toman las decisiones y por la evidente corrupción en el sistema judicial, causa esencial para que el país viva al margen de la ley.

Hasta mañana